¿Qué es el polietileno y para qué se usa en embalajes?
Como minorista ya sabes lo importante que es que el producto llegue en óptimas condiciones al cliente. Especialmente si se trata de productos frágiles como botellas de cristal o piezas de artesanía o bisutería. Durante años, el polietileno ha sido uno de los materiales más utilizados en los embalajes, pero puede que no lo conozcas bien, así que vamos a profundizar un poco más sobre este material.
En este post sobre qué es la espuma de polietileno, hablaremos:
¿Qué es el polietileno?
Es uno de los polímeros más simples que existen, un plástico. Se puede trabajar de muy diversas formas y añadirle más resistencia o densidad combinándolo con otros productos químicos, lo que ha hecho que se vuelva tan popular y tan común.
Encontramos polietileno en las bolsas de plástico, en tuberías, en el film de cocina, envases de productos de limpieza, cubos de agua, tuberías, o en el foam, etc.
Polietileno en el embalaje
Tratándose del sector del embalaje nos encontramos con este material en diferentes versiones. La más sencilla es el film que se utiliza para el embalaje de productos de alimentación. Puede ser más o menos grueso en función de lo que haya que proteger.
Otra vertiente sencilla son las bolsas de plástico transparente. Su uso es muy común para el embalaje de productos pequeños como tornillos o frágiles como las piezas de bisutería.
Una versión un poco más elaborada es la espuma de polietileno. La vemos muy a menudo en los productos tecnológicos. Son láminas más o menos gruesas que mantienen los dispositivos aislados y a salvo de golpes y de la humedad.
Para el embalaje de artículos especialmente frágiles se recurre a la versión más flexible del polietileno, el conocido como plástico de burbujas.
¿Existen alternativas al polietileno?
Después de décadas y décadas de uso del plástico ahora empezamos a ser conscientes de lo peligroso que es este material para el medio ambiente debido a lo mucho que tarda en descomponerse.
Existe toda una corriente a favor de la reducción de plásticos en la vida diaria, y eso incluye a los embalajes, que es precisamente uno de los campos en los que más se recurre a los diferentes derivados del plástico. Si te interesa este tema, échale un ojo a nuestro post con recursos para evitar las bolsas de plástico en tus envíos y tienda.
Por suerte, ya nos podemos encontrar con alternativas prácticas y económicas al polietileno. Un buen ejemplo son las bolsas de tela (mucho mejor si además son telas recicladas). Pueden sustituir sin ningún problema a las bolsas de plástico.
Además, tienen la ventaja añadida de tener más de un uso. Si un consumidor recibe los tornillos del mueble que ha comprado en una bolsa de plástico la abrirá y la tirará. Si en lugar de eso le damos una bolsa de tela, lo más seguro es que le acabe dando otro uso, reduciendo los residuos.
Hay casos en los que los embalajes no tienen más remedio que ser de un solo uso, pero incluso aquí encontramos alternativas. Una buena opción son los envoltorios de algodón con cera natural, que se pueden utilizar incluso en el sector de la alimentación.
En caso de que estés buscando una alternativa más sostenible a las cajas de plástico, puedes echar un vistazo a las cajas de madera de la tienda de Sincla:
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Así que ya lo sabes, siempre hay alternativas. Atrévete a destacar y a apostar por un desarrollo sostenible en tu negocio con el uso de embalajes más ecológicos.
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